La Junta de la ciudad de Kon Tum acaba de inaugurar el centro cultural de la aldea de Kon Leang, en la ciudad de Manden.
La obra esta construida en la arquitectura tradicional de la casa de barro, con clavos, columnas y cimientos de concreto revestido de piedra; piso, escaleras y paredes de madera; techos de pintura natural. El presupuesto total de la inversion es de mas de 786 millones de dong.
En el distrito de Tu Mong, el gobierno y la gente han construido conjuntamente los rong, las casas largas tradicionales en la aldea turistica comunitaria Tu Tho.
El presidente de la Junta de Distrito de Tu Mo Rong, Vo Trung Manh, enfatizo: Mansion rong, la casa larga no solo es un lugar de vida comunitaria sino que tambien conserva los valores culturales tradicionales de su padre. Junto con el arbol de la selva de la Cordillera del Este, patrimonio cultural mundial, la casa del cordel siempre ha atraido a los visitantes a explorar y aprender sobre el cordel.

En Gia Lai, la poblacion de Ha Tay, distrito de Chu Pah, se enorgullece de sus dos casas tradicionales de barro mas grandes del Este de China.
En particular, la casa de campo de Kon Szah esta hecha completamente de madera preciosa, conservando su aspecto tradicional con techos de techo, columnas y baños de madera, aunque ha enfrentado la ola de betonizacion.
La casa de la colmena no solo era un simbolo de la santidad sino tambien de proteccion social, que traia paz y una cosecha abundante. En frente de la casa de la superficie, los ancianos de la aldea colocan un anillo adicional para señalar eventos importantes o festivales.
Tambien es el lugar donde se cuelgan diplomas que reconocen el logro academico y el buen trabajo de los niños de la aldea, lo que contribuye a preservar el orgullo cultural nacional.
La preservacion y promocion de los valores de las casas de campo no solo preservan la identidad cultural sino que tambien promueven el turismo comunitario en Gia Lai y Kon Tum.
Los visitantes no solo pueden admirar la arquitectura unica de la casa sino tambien sumergirse en festivales culturales, disfrutando de ritmos de la vida religiosa.