A principios del sol del verano, la risa crujiente y los ojos brillantes de los niños sonaron en todas partes, trayendo alegria y esperanza.
La enseñanza del tio Ho: "Los niños como los brotes en las ramas, saben como comer y dormir, saber como estudiar es bueno" recordarles a los adultos la responsabilidad de protegerlos y nutrirlos en un entorno saludable. Es donde cada niño, sin importar que circunstancias, esten estudiando, jugando y desarrollando de manera integral.


Cada niño tiene un "universo" brillante, donde la imaginacion convierte la grava en un tesoro, una nube en un cuento de hadas. Ese universo no necesita un borde o un idioma comun, solo una escucha y respeto para volar alto.
El 1.6 no es solo un regalo o un festival, sino un momento para que los adultos se pidan por nosotros mismos: ¿realmente hemos escuchado a los niños? ¿Ha creado un espacio seguro y igual para todos los bebes, incluidos los niños con discapacidades, la inmigracion o la minoria, para aprender, divertirse y soñar?

Cada pregunta "ingenua" de los niños abre un mundo nuevo. Cada juego simple enseña a los niños sobre la cooperacion, la creatividad y la resolucion de problemas. Cuando se alienta a los niños a recibir diferencias, aprenden a respetar y compartir.


La felicidad infantil proviene de cosas simples: helado fresco, historias antes de dormir, abrazo de padres o diversion jugando con amigos, sin importar de donde venga o necesite una silla de ruedas. Un ambiente donde los niños son amados y es la base de la paz y la justicia.


Los niños de hoy son ciudadanos globales en el futuro. Cada sonrisa joven, ya sea en cualquier tierra, es una futura semilla para la humanidad calida. El Dia Internacional del Niño 1.6 nos recuerda que mantengamos esas semillas juntas, para que el futuro este lleno de esperanza y amor.