Los jugadores del Barcelona y el entrenador Ronald Koeman volvieron a la rotacion con los primeros dias de entrenamiento preparandose para la nueva temporada. El trabajo de reorganizacion de personal continua para asegurar una formacion competitiva en los tres frentes.
Sin embargo, para el presidente Josep Maria Bartomeu, la tormenta no ha terminado. Recientemente, el equipo catalan anuncio que la eleccion del presidente se celebrara el 20 y el 21 de marzo de 2021. Bartomeu ha sido objeto de numerosas criticas en el pasado, cuando su liderazgo fue atribuido a problemas de gestion y de gestion interna.
En las proximas elecciones, Bartomeu no estara entre los candidatos, ya que segun las reglas del Barça nadie puede ocupar el cargo de presidente por tres mandatos consecutivos. Pero Bartomeu podria tener que dejar el cargo antes, ya que la campaña para recoger firmas para llevar a cabo el voto de censura hasta el 10 de septiembre ha recibido mas de 7.500 votos de los miembros.
La campaña necesita las firmas de 16.520 de los 140.000 miembros actuales para que se lleve a cabo el voto de confianza extraordinario. Candidatos como Victor Font, Joan Laporta y Jordi Farre supuestamente firmaron con una peticion de voto de confianza.
Bartomeu podria seguir en el cargo hasta marzo del año siguiente. Pero aun asi, dejara el estadio sin cumplir su promesa de dejar al nuevo presidente del Barça un legado grande y digno de orgullo.
El anuncio del Barça dice que la reunion anual de la Asamblea se celebrara el 25 de octubre, el mismo dia del Superclasico contra el Real Madrid en el Camp Nou. Si la pandemia de COVID-19 afecta, el momento puede ser trasladado a otro dia, pero de todos modos, este ha sido un año dificil para el Barça financieramente.
El club que juega en el Camp Nou estima que sus ingresos cayeron un 30% con respecto a 2019, cuando se registro un record de 1.000 millones de euros, es decir, una reduccion de unos 315 millones de euros. Por supuesto, hay razones para ello, como el impacto de la pandemia de COVID-19, pero no se puede ignorar la ineficacia de la estrategia de inversion de Bartomeu y su equipo directivo.