La profesion tradicional penso que con el tiempo, de repente se volvio atractiva gracias a las historias de una niña, una verdadera ingenua pero no solo para ganarse la vida sino tambien relacionada con la naturaleza, con la comunidad y consigo misma.
En la pelicula coreana "Si la vida nos da mandarinas", hay una imagen que hace que la audiencia se ahogue: la mujer hai nu la espalda, sus manos tiraron de la red en medio del frio Mar Jeju. No habia largas colas, no hay necesidad de interpretar: sus ojos, manos embotelladas y buceo profundo en el oceano, dijo en lugar de una vida dura. Sacrifico en silencio todo para que sus hijos pudieran escapar del miserable ciclo de vida que estaba sufriendo.
La historia de la pelicula resulto no ser completamente ficticia. ¡En la isla de Jeju en la vida real, hay una mujer joven que vive asi! Lee Ah-Ran, de 32 años, es la hembra mas joven hai en el pueblo de Hagwi-ri, donde la mayor parte de Haenyeo tiene mas de 60 años. Renunciando al trabajo de la oficina, decidio hacer trabajos tradicionales, no volver al pasado, sino encontrar una manera de vivir bien para el presente.
Buceo de buceo para vivir lentamente, vivir real
Hace cientos de años, las mujeres de Jeju fueron al mar para ganarse la vida. Se llaman Haenyeo, que significa "hai nu", buceo diario de hasta 20 m de profundidad, sin usar oxigeno, solo en funcion de la respiracion y las tecnicas tradicionales de buceo.
El equipaje de un Haeneo es muy simple: una simple mascara de buceo, envoltura de correa de plomo alrededor de la cintura, un cuchillo de buceo y una bolsa de malla llamada Tewak para sostener los mariscos para atrapar. Trabajan durante horas, independientemente del sol frio o intenso, elegido por marea y peces.
Lee Ah-Ran solia trabajar en marketing y odontologia, viviendo en grandes ciudades. Ella compartio que la vida de su oficina la hizo agotada, pero un viaje a la isla Jeju cambio todo. Lee decidio asistir a Haenyeo Beophwan en Seogwipo, una de las dos academias en la isla Jeju especializada en capacitar a la nueva generacion de Haenyeo.
"En la escuela Haenyeo, aprendimos una variedad de tecnicas: controlar la respiracion, la agachado, la cosecha de mariscos", dijo al Corea Herald, "pero honestamente, lo mas importante es comprender la cultura y la filosofia de la comunidad de Haenyeo".
Despues de 3 meses de pasantia con Hagwi-Ri Fishing Cooperative, Lee se convirtio oficialmente en un verdadero Haenyeo.
Lo especial en Lee es adicional a las herramientas tradicionales, ella tambien lleva una camara pequeña, montada en la boya para grabar el viaje de buceo. Las peliculas lentamente, sin comentarios, solo imagenes y sonidos, pero atrajeron a mas de 55,000 seguidores en Instagram.
"Inicialmente, no tenia la intencion de convertirme en un creador de contenido en el espacio cibernetico. Simplemente registro la belleza y me siento de Jeju. Con el tiempo, el buceo se convierte en una parte importante asociada con mi vida y, naturalmente, se convierte en un contenido en linea cuando no es bueno", dijo Lee.
A traves del canal de Lee, muchos jovenes vienen a Jeju. Algunos de la profesion, otros simplemente quieren vivir lentamente por un tiempo. Para ella, cada vez que el buceo no es solo un trabajo, sino una curacion y profundamente conectada consigo misma.
Mantenga el patrimonio a traves de la narracion
Actualmente, el numero de Haenyeo esta disminuyendo significativamente. Segun las estadisticas del gobierno de la isla de Jeju, en 2024, solo habia alrededor de 2.839 haenyeo operando, de los cuales mas del 90% tenian mas de 60 años. De 2014 a ahora, este numero ha disminuido en casi un 40%.
En 2016, Haenyeo fue reconocido por la UNESCO como un patrimonio cultural intangible de la humanidad. El gobierno de Jeju ha lanzado muchas politicas de apoyo, desde licencias hasta beneficios de ingresos. Pero sin la proxima generacion, todos los esfuerzos corren el riesgo de no traer resultados valiosos.
Es por eso que la historia de Lee Ah-Ran se vuelve importante. No solo el buceo, ella tambien actua como narradora. Desde su camara, grabo viajes en playa, mercados de pescado, reuniones de aldeas ... Tambien recolecto datos de vida marina para ayudar a la comunidad a monitorear la transformacion de la submarina.
"Quiero que Haenyeo no se conozca como una imagen turistica, sino una cultura viva, una voz, una historia", dijo Lee.
Lee lo esta haciendo de la manera mas cercana: vivir como un Haeneo, compartiendo en silencio todos los dias. A pesar del ingreso inestable y tener que trabajar en parte, todavia se sentia digna: "Simplemente sumergirme profundamente, mantener su respiracion y regresar a un caracol o un paquete de algas, me siento muy orgullosa. Estoy contribuyendo a mantener una de las tradiciones mas antiguas de esta isla".
Sin detenerse alli, Lee tambien participo activamente en campañas ambientales. Despues de presenciar el agua de mar cada vez mas calida, que afecta la ecologia marina, dijo que Haenyeo deberia ser la voz del oceano que se olvida.
"El cambio climatico es real. Las algas no crecen. El pescado es menos. El mar esta caliente. Como un Haeneo que vive en el mar todos los dias, me encuentro responsable de hablar" - dijo la joven Lee Ah -ran.