La Fiscalia Real Britanica (CPS) acaba de llamar la atencion al decidir cancelar las acusaciones de espionaje contra 2 hombres sospechosos de trabajar para la inteligencia china un movimiento que hace que expertos legales y parlamentarios se pregunten sobre la transparencia en el proceso de investigacion.
Los 2 sospechosos incluyen a Christopher Berry y Christopher Cash un ex asistente parlamentario del Partido Conservador que fueron arrestados en 2023 bajo la Ley de Secretos Oficiales. Estan acusados de proporcionar informacion confidencial a China durante su acercamiento a la legislatura britanica.
Sin embargo el 8 de octubre el CPS anuncio la cancelacion de la acusacion con el argumento de que 'las pruebas disponibles no son suficientes para garantizar la capacidad de condenacion'. Esta decision fue aprobada directamente por el Fiscal General britanico Stephen Parkinson el jefe del CPS.
Expertos legales y parlamentarios britanicos han criticado diciendo que este es un 'punto de inflexion inusual' en un caso considerado el mas grave relacionado con la seguridad nacional britanica en la ultima decada.
Algunos parlamentarios expresaron su preocupacion de que la presion politica o los factores diplomaticos pudieran haber afectado la decision del CPS especialmente en el contexto de que Gran Bretaña esta tratando de reparar las relaciones comerciales con China.
El profesor de derecho Clive Walker de la Universidad de Leeds comento: 'Si las acusaciones de espionaje se anulan debido a pruebas debiles muestra que las agencias de seguridad podrian haber actuado demasiado pronto. Pero si la causa es la presion politica esto sera un duro golpe para el prestigio del sistema judicial britanico'.
La ex Ministra del Interior Suella Braverman califico esto de 'un error inaceptable' mientras que muchos parlamentarios exigieron la publicacion de todos los documentos de investigacion para aclarar la verdadera razon detras de esta decision.
Hablando despues de que se eliminara la acusacion Christopher Cash dijo que era 'totalmente inocente' y agradecio a quienes lo apoyaron durante los ultimos 2 años.
Este caso se considera un duro golpe para los esfuerzos del gobierno britanico para reforzar la seguridad nacional ante las actividades de espionaje extranjero.
Algunos expertos creen que este fallo podria hacer que Londres sea mas cauteloso en futuras investigaciones de espionaje y al mismo tiempo abrir una nueva controversia sobre los limites entre la seguridad nacional y la libertad personal.