El 3 de agosto (hora de Estados Unidos) los asesores economicos de la Casa Blanca se pronunciaron para defender la decision del presidente estadounidense Donald Trump de despedir a Erika McEntarfer - miembro de la Oficina de Estadisticas Laborales de Estados Unidos (BLS).
Esta medida se produce despues de que el organismo publicara un informe ajustado que muestra que el numero de empleos reales es significativamente menor que el informe inicial.
En un informe del 2 de agosto el BLS dijo que el numero de empleos creados en mayo y junio se corrigio reduciendo netamente mas de 258.000 empleos. Trump acuso a McEntarfer de 'crear datos' pero no dio pruebas y dijo que pronto nombrara un nuevo lider.
La Sra. McEntarfer solo expreso su honor de servir en la BLS y elogio al equipo de funcionarios de la agencia. Sin embargo la decision de Trump ha enfrentado criticas de muchos expertos y ex funcionarios preocupados por afectar la independencia y el prestigio de los datos economicos estadounidenses.
Kevin Hassett director del Consejo Economico Nacional de Estados Unidos dijo que el presidente Trump tiene razones legitimas para cambiar de liderazgo. El representante comercial estadounidense Jamieson Greer tambien dijo que Trump esta'muy preocupado' por la precision de las cifras laborales.
Por el contrario los economistas y ex lideres de la BLS advierten que el despido repentino de la Sra. McEntarfer podria dañar gravemente la reputacion de esta agencia. William Beach ex miembro de la BLS enfatizo que un miembro no puede manipular los datos de empleo y los ajustes anuales es normal.
El exsecretario de Hacienda de Estados Unidos Larry Summers califico las acusaciones de Trump de 'fantasma' afirmando que los datos fueron elaborados por cientos de expertos de acuerdo con un proceso estricto garantizando la objetividad y la precision.