Para dar impulso a la final de la Copa Mundial 2018, la seleccion argentina planea jugar un partido amistoso con Israel este sabado. Sin embargo, un gran problema de comunicacion ha ocurrido. Un grupo de palestinos se reunio en el centro de entrenamiento argentino en Barcelona para protestar contra el encuentro.
Mas aterrador aun, el presidente de la Federacion Palestina de Futbol ordeno a los aficionados que quemaran la camiseta de Lionel Messi si el jugador viajaba a Jerusalen para jugar. Mientras tanto, el primer ministro israeli, Benjamin Netanyahu, en un intento por salvar la situacion, pidio al presidente argentino, Mauricio Macri, que convenza al equipo de no cancelar la visita.
Sin embargo, como una gota en un vaso, la proporcion de partidos es muy fragil. Actualmente, la seleccion argentina se esta concentrando en Barcelona y preparando un plan para buscar otro rival para poder aclarar las tropas antes de marchar a Rusia.