En consecuencia en una carta enviada a la Ministra de Comunicaciones de Australia Anika Wells los altos directivos de Google y YouTube en Australia dijeron que estan 'considerando las opciones legales' si YouTube la plataforma propiedad de esta empresa es incluida por Canberra en la lista de prohibicion de uso para niños menores de 16 años segun la primera orden de prohibicion de las redes sociales del pais.
El contenido de la carta publicada en los periodicos pertenecientes a la agencia de medios News Corp Australia explico claramente que YouTube es una plataforma de transmision de video en linea no una red social y que poner YouTube en la categoria de prohibicion no encaja con los terminos de la Constitucion australiana.
Se sabe que la prohibicion entrara en vigor en diciembre de 2025 y las plataformas de redes sociales de Meta (propietario de Facebook Instagram) TikTok y Snapchat tendran que tomar'medidas razonables' para evitar que los niños menores de 16 años creen o accedan a cuentas de redes sociales.
Inicialmente el Gobierno australiano decidio no retirar YouTube de la lista porque consideraba que la plataforma tenia muchos contenidos utiles sobre educacion y salud. Sin embargo en junio de 2025 el principal asesor de seguridad en linea de Australia y tambien miembro del Comite de Seguridad Electronica del pais propuso no excluir ninguna plataforma. Esto creo una gran presion para obligar al gobierno a reconsiderar la decision con YouTube.
Hablando en el canal de television Seven Network el 28 de julio la Ministra de Servicios Sociales Tanya Plibersek afirmo que el gobierno 'hara todo lo posible para garantizar la seguridad de los niños australianos'.
Esta dura declaracion muestra que el Gobierno australiano esta dispuesto a enfrentarse a las corporaciones tecnologicas en un contexto en el que los padres y expertos estan cada vez mas preocupados por el impacto negativo de las redes sociales en la salud mental y el comportamiento de los adolescentes.
En marzo de 2025 representantes de Meta TikTok y Snapchat tambien enviaron una peticion oponiendose a la exencion de YouTube por parte del Gobierno australiano argumentando que esto es un favoritismo y debilita el objetivo politico.
Segun la prohibicion las plataformas que permitan el acceso a niños menores de 16 años despues de que la ley entre en vigor se enfrentaran a una multa de hasta 50 millones de AUD (equivalente a 32,8 millones de dolares).