El pez rojo contiene un alto contenido de proteinas, vitamina D y acidos grasos omega-3. Estos son los elementos esenciales que apoyan la estructura y la funcion osea. En particular, la vitamina D ayuda al cuerpo a absorber el calcio de manera mas eficiente, mientras que los omega-3 tienen una capacidad antiinflamatoria, lo que reduce los sintomas de dolor en las articulaciones, especialmente en personas con artritis leve.
Sin embargo, el metodo de elaboracion juega un papel muy importante en la preservacion y la promocion de los efectos de estos nutrientes.
La Organizacion Mundial de la Salud y la Organizacion de las Naciones Unidas para la Alimentacion y la Agricultura recomiendan dar prioridad a los metodos de elaboracion de aceite bajo en grasa como el coccion, la coccion o el asado a temperatura moderada para mantener el contenido de vitaminas y omega-3.
Las fritas frias o las fritas con mucho aceite no solo agotan los nutrientes sino que tambien aumentan la cantidad de grasas saturadas que agravan la artritis.
Un estudio publicado en The Journal of Nutrition en 2005 mostro que las personas que consumian pescado frito dos o tres veces por semana tenian una mayor densidad osea y menos sintomas de dolor en las articulaciones que las personas que comian pescado frito regularmente.
Cuando se prepara el pez rojo, se debe combinar con verduras ricas en vitamina C como el brocoli, el tomate, la chile para aumentar la absorcion de colageno y la anti-oxidacion, lo que ayuda a mantener la flexibilidad de las articulaciones.
El pez rojo es una fuente de nutrientes beneficiosos para las articulaciones, pero se debe procesar adecuadamente, especialmente en cocina o en el horno, para maximizar los beneficios. En combinacion con una dieta saludable y una actividad fisica adecuada, una buena ingesta de pez rojo puede contribuir a la proteccion de la salud de las articulaciones de manera sostenible.