El principe Carlos toma la mano de la madre de la novia
En la capilla de San Jorge, la familia de la novia solo tiene la madre de la novia presente. A pesar del atuendo azul claro de Oscar de la Renta, su rostro estaba lleno de emocion y ocasionalmente, mostrando un poco de perdida, tratando de contener las lagrimas cuando vio a su hija casarse. Al final de la ceremonia, el principe Carlos dejo de esperar a Doria, tomandose de la mano para guiarla para seguirlo a el y a los obispos.
El vestido de la boda
El Rolls Royce Phantom se detiene, la novia sale, los dos novios ayudan a extender un lienzo de cinco metros de largo con flores que representan a cada uno de los paises del Commonwealth. Los gemelos que se estaban cambiando los dientes corrieron a dar vueltas, ayudando a Meghan a levantar el velo del suelo cuando la novia entro sola en la iglesia.
"Gracias, papa"
El principe Harry hizo una aparicion impresionante en uniforme, sonriendo y saludando al publico, pero al entrar en la capilla, Harry parecia tenso. Cuando el principe Carlos llevo a la novia al estrado, Harry casi lloro. El se quedo con "gracias, papa", y le dio las llaves a Meghan.
El arzobispo estadounidense "juega a flote"
El arzobispo estadounidense Michael Curry, invitado por Meghan, hizo sonreir a los invitados a la boda durante su discurso. Su tema principal era el poder del amor, citando a personajes famosos, desde el obispo ganador del Nobel de 1964, Martin Luther King, hasta el teologo del siglo XX, Chardin, y mencionando la espiritualidad de los afroamericanos y los esclavos negros en los Estados Unidos, temas ajenos a la "tradicion" en las bodas reales britanicas. Al final de su discurso de casi 15 minutos, que segun la prensa fue "un juego", hizo reir a la audiencia cuando dijo: "Todos ustedes deben casarse".
El beso
Normalmente, los besos entre los recien casados de la realeza britanica se realizan en el balcon del Palacio de Buckingham, pero esta vez, el principe Harry y la novia Meghan optaron por un beso en el piso inferior, en la entrada de la capilla.
La novia, con su lenguaje torpe, toma la mano del principe Harry, se detiene y le pregunta en voz baja: "¿Nos besamos?" Harry dijo: "Si". Y se besan ante el jubilo de la multitud.
El principe Harry, de 33 años, y la actriz estadounidense Meghan Markle, de 36, se juraron amor y afecto para toda la vida ante unos 800 invitados en la boda celebrada en el palacio de Windsor el 19 de mayo. Despues de la boda, el principe Harry y su esposa tomaron los titulos de duque y princesa de Sussex.