Segun la Organizacion Mundial de la Salud, el higado es el organo principal que ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo a traves de la transformacion de las toxinas en formas que son mas faciles de eliminar. El consumo de alimentos ricos en antioxidantes como la naranja puede ayudar a la funcion hepatica, reduciendo el daño a las celulas hepaticas causado por el estres oxidativo.
Un estudio publicado en el Journal of Agricultural and Food Chemistry encontro que los flavonoides en la naranja, especialmente la hesperidina y la naringenina, tienen la capacidad de combatir la inflamacion, mejorar la actividad de las enzimas hepaticas, y ayudar al higado a recuperarse de los daños causados por toxinas o alcohol. La vitamina C de las naranjas tambien ayuda a neutralizar los radicales libres, una de las principales causas de daño a las celulas del higado.
Sin embargo, para lograr la desintoxicacion del higado, la forma de comer una naranja tambien es importante. Se recomienda comer naranjas enteras, en lugar de solo beber jugo, para aprovechar la fibra, ayudar a la digestion y reducir la absorcion de azucares simples, que pueden engordar el higado si se consume en exceso.
Las amas de casa que preparan la comida para la familia tambien deben tener en cuenta que el mejor momento para comer es en la mañana o despues de las comidas de 30 minutos a 1 hora para ayudar al cuerpo a absorber bien los nutrientes sin aumentar el acido gastrico.
Tambien es recomendable no comer naranjas cuando se tiene hambre o justo antes de acostarse, ya que su contenido de acido natural puede irritar el estomago, interrumpir el sueño y ejercer presion inversa sobre el higado. Si alguien en su familia tiene enfermedad hepatica cronica, es recomendable consultar con un medico antes de tomar naranjas regularmente para asegurarse de que se ajusten a su estado de salud.