La grasa de cerdo contiene principalmente grasas saturadas que cuando se consumen en exceso pueden afectar el metabolismo de los lipidos el sistema cardiovascular y el peso. Por lo tanto hay algunos grupos de sujetos que no deben consumir o deben limitar significativamente la grasa de cerdo.
En primer lugar las personas con enfermedades cardiovasculares o altos riesgos cardiovasculares deben evitar el uso frecuente de grasa de cerdo. Las grasas saturadas pueden aumentar el colesterol LDL (colesterol malo) lo que promueve la aterosclerosis aumentando el riesgo de infarto de miocardio y accidente cerebrovascular. Para las personas que estan tratando hipertension o trastornos de la grasa en la sangre es esencial reducir al maximo la grasa animal en general incluida la grasa de cerdo.
El segundo grupo son las personas con higado graso obesidad o sindrome metabolico. La grasa de cerdo tiene un alto contenido de energia lo que hace que sea facil aumentar el almacenamiento de grasa en el cuerpo si se consume con regularidad. Para el higado graso especialmente la forma no causada por el alcohol la limitacion de las grasas saturadas es un factor importante para mejorar la condicion de la enfermedad.
En tercer lugar las personas con enfermedad renal cronica tambien deben limitar la grasa de cerdo. La nutricion para los riñones debe priorizar las grasas saludables y limitar los alimentos inflamables o dificiles de digerir mientras que la grasa animal puede aumentar la carga metabolica para el cuerpo.
Ademas las personas mayores o con poca actividad tambien pertenecen al grupo a tener cuidado. Sus necesidades energeticas son mas bajas mientras que el consumo de grasa de cerdo puede provocar facilmente aumento de peso y trastornos lipidos.
Finalmente las personas con artritis reumatoide trastornos digestivos o enfermedades del tracto digestivo deben evitar aun mas la grasa de cerdo porque la grasa indigestible puede causar dolor abdominal hinchazon o empeorar la enfermedad.