En muchas historias matrimoniales se menciona a menudo la excesiva intervencion de los suegros en la vida matrimonial de los hijos. Cuando esto sucede realmente el impacto en los sentimientos familiares es claro especialmente para las personas que acaban de entrar en una nueva familia.
Muchas parejas despues de casarse todavia viven con sus suegros y no pocas personas se sienten limitadas por el control demasiado profundo. No solo la gestion de los gastos la vida privada sino tambien la forma de criar a los hijos se convierten en un problema si no hay el consentimiento de la suegra.
Las decisiones aparentemente sencillas en la vida cotidiana como ir de compras elegir un menu o dedicar tiempo el uno al otro pueden convertirse en fuentes de estres.
La Sra. Mai Linh (29 años de Hanoi) compartio: 'Cuando nos mudamos a vivir juntos todo tenia que ser preguntado por mis suegros. Al principio todavia intentaba complacer a mis suegros pero gradualmente me sentia avergonzada. No es que mis suegros no sean buenos padres sino que a veces las cosas son demasiado detalladas e interaccionan demasiado lo que dificulta que mi esposo y yo mantengamos el espacio privado'.
Una de las mayores preocupaciones de las parejas es la decision de mudarse a vivir juntos. ¿Entienden y aceptan los suegros esto? ¿Hara que el marido se sienta incomodo entre las dos mujeres que ama? Esta es una situacion que requiere una cuidadosa consideracion para proteger la felicidad matrimonial y mantener la armonia familiar.

Muchas parejas enfrentan presion de sus padres especialmente cuando viven juntos. Establecer limites es muy importante. Debe haber un intercambio franco y respeto mutuo para que toda la familia entienda que el espacio privado de la pareja es necesario.
La experiencia practica muestra que en el matrimonio la relacion mas dificil a veces no es con el conyuge sino con los padres del socio. Los padres del esposo se convierten en extraños a medida que se vuelven cercanos pero esta cercania debe ir acompañada de limites claros. Ya sea armoniosa o no establecer limites que respeten y protejan la vida privada de la pareja es necesario.
Vivir juntos y enfrentarse a la intervencion de los suegros no es solo un desafio sino tambien una oportunidad para aprender a comunicarse comprender y mantener limites razonables. Esta es una forma de proteger la felicidad de los dos conyuges manteniendo el respeto por los miembros de la familia ayudando a que las relaciones familiares sean mas duraderas y armoniosas.