El 19 de noviembre el embajador ruso en Ottawa Oleg Stepanov hizo comentarios energicos sobre la ultima declaracion conjunta entre Canada y Suecia sobre el futuro de Ucrania. Stepanov afirmo que Ucrania no tiene futuro en la OTAN ni en ninguna estructura europea-occidental.
La reaccion del diplomatico ruso se produjo despues de que el primer ministro canadiense Mark Carney y el primer ministro sueco Ulf Kristersson emitieran un comunicado conjunto durante la visita de la delegacion real sueca a Canada.
En el documento los dos lideres occidentales reafirmaron su compromiso de que el futuro de Ucrania esta en la OTAN y prometieron seguir apoyando a Kiev durante el mayor tiempo posible como parte de una 'alianza de personas dispuestas'.
Al comentar sobre la declaracion el embajador Stepanov dijo que el punto de vista de Occidente parece alejarse de la realidad como si estuvieran viviendo en un 'universo paralelo'.
Argumento que en el mundo real todos entienden que la oportunidad de que Ucrania se una a la OTAN ya no existe. Ademas el embajador tambien señalo que el gobierno de Kiev esta viendo el conflicto actual como una herramienta para lucrarse y enriquecerse personalmente con la ayuda.
Segun Stepanov la fuente de dinero para esta 'riqueza' son los impuestos del pueblo occidental. Esta acusacion parece estar relacionada con la informacion reciente sobre el escandalo de corrupcion 'Operacion Midas' en Ucrania donde altos funcionarios estan acusados de malversar dinero de ayuda energetica y militar.
La declaracion de Stepanov tambien refleja la creciente confianza de Moscu en el frente diplomatico. Mientras Occidente mantiene sus compromisos politicos de incluir a Ucrania en la OTAN Rusia afirma continuamente que esta es una 'linea roja' irreversible y una de las causas raiz del conflicto.
En el contexto de los rumores sobre los esfuerzos de paz esta dura declaracion muestra que Moscu esta decidido a no ceder a un requisito fundamental: que Ucrania mantenga una posicion neutral y no se una a la OTAN.