El presidente estadounidense Donald Trump afirmo que los trabajadores extranjeros siempre son bienvenidos y no quiere desanimar a los inversores. Esta declaracion se hizo en un contexto en el que unos 475 trabajadores en su mayoria coreanos fueron arrestados en el sitio de construccion de la fabrica de baterias de coches electricos operada por Hyundai-LG en Georgia.
Segun el Servicio de Inmigracion y Aduanas de EE. UU. (ICE) estos trabajadores se alojaban fuera de la fecha limite de la visa o usaban permisos que no eran apropiados para el trabajo manual. La persecucion se considera la campaña individual mas grande desde que Trump lanzo una campaña para reprimir la inmigracion ilegal en todo Estados Unidos. Las imagenes de los trabajadores siendo esposados han causado una profunda preocupacion en Corea del Sur donde los sindicatos exigen a Trump que se disculpe oficialmente.
El presidente surcoreano Lee Jae Myung advirtio el 11 de septiembre que el incidente podria afectar a las inversiones futuras y califico la persecucion como un acto de 'confusion'. El 12 de septiembre Seul trajo a estos trabajadores de regreso al pais.
En una publicacion en la red social Truth Social Trump dijo que Estados Unidos todavia permite temporalmente a expertos extranjeros participar en la construccion de productos complejos como chips semiconductores computadoras barcos y trenes. Enfatizo que Estados Unidos necesita aprender de otros para mejorar la tecnologia y pronto los superara en el futuro.
Los damos la bienvenida a ellos a sus empleados y estamos dispuestos a aprender para hacerlo mejor' afirmo Trump para tranquilizar tanto a los trabajadores como a los inversores extranjeros.