El tomate aunque no es una fuente abundante de hierro juega un papel importante en el apoyo a la absorcion de hierro gracias a su alto contenido de vitamina C y antioxidantes.
Un tomate promedio de unos 120 g contiene unos 20 mg de vitamina C lo que equivale al 25–30% de las necesidades diarias del cuerpo. Se ha demostrado que la vitamina C es un factor que apoya eficazmente la absorcion de hierro sin hemo (la clase de hierro que se encuentra en las plantas).
Segun la investigacion cuando se combinan alimentos ricos en vitamina C como el tomate con fuentes de hierro vegetal como las aves de corral las capacidades de absorcion de hierro pueden aumentarse entre 2 y 3 veces.
Ademas el tomate contiene el licopeno un poderoso antioxidante que ayuda a proteger los globulos rojos de los daños causados por los radicales libres. La suplementacion con licopeno puede mejorar la funcion hematoencefalica y reducir los niveles de estres oxidativo en personas con anemia.
Añade tomate a tu dieta
Para lograr la maxima eficacia de la suplementacion de hierro las personas con anemia deben comer tomates crudos o procesarlos ligeramente como asar mezclar en ensalada o hacer jugos en lugar de cocinarlos demasiado cocidos porque la vitamina C se descompone facilmente a altas temperaturas.
Tambien debes comer tomates con platos ricos en hierro como carne roja huevos higado animal o soja. Por ejemplo la ensalada de carne de res con tomate es una combinacion ideal para aumentar la absorcion de hierro.
Sin embargo las personas con dolor de estomago o acidosis deben limitar el consumo de tomates crudos porque el acido puede irritar la mucosa gastrica.
El tomate no solo es un alimento que ayuda eficazmente a complementar el hierro para las personas con anemia gracias a su alto contenido de vitamina C sino que tambien contribuye a proteger los globulos rojos y mejorar la salud sanguinea si se usa correctamente.