El agua de coco es un refresco natural, rico en electrolitos y micronutrientes como potasio, magnesio, calcio y vitamina C.
Segun la investigacion del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, una taza de agua de coco de 240 ml contiene aproximadamente 600 mg de potasio, equivalente al 17% de las necesidades diarias. Es por eso que a menudo se recomienda el agua de coco para complementar el agua y los electrolitos, especialmente despues del ejercicio o la deshidratacion.
Sin embargo, beber agua de coco en la mañana, cuando el cuerpo esta recien despertado y con la barriga vacia, debe considerarse con cuidado.
Algunas personas con un sistema digestivo sensible pueden experimentar sensaciones de saciedad, diarrea leve o desequilibrio electrolitico si beben demasiada agua de coco cuando tienen hambre. La razon es que el jugo de coco es un suave deshidratante, por lo que cuando se tiene hambre, beber grandes cantidades puede causar una leve deshidratacion en personas sensibles.
Ademas, segun la Organizacion Mundial de la Salud, no se recomienda el consumo de mas de 1-2 vasos de agua de coco al dia para personas con problemas renales, cardiovasculares o que estan en tratamiento con diureticos, ya que el alto contenido de potasio puede afectar la funcion de la filtracion sanguinea y el ritmo cardiaco.
Por lo tanto, si desea tomar agua de coco por la mañana, debe tomarla despues de una comida ligera o despues de un desayuno de 30 minutos. Se recomienda elegir agua de coco fresca y pura, evitando la que contiene azucar o conservantes.
Para las personas con enfermedades cronicas, especialmente diabetes o insuficiencia renal, es recomendable consultar a un medico antes de incluir el jugo de coco en la dieta matutina.
Aunque el agua de coco es una bebida saludable, su uso moderado y oportuno, especialmente en la mañana, es importante para maximizar los beneficios y evitar efectos secundarios no deseados.