Segun la psicologa infantil Laura Markham, de la Universidad de Columbia, la clave esta en construir un horario estable que combine emociones positivas. Los niños pequeños no tienen el mismo conocimiento de la hora de dormir que los adultos, pero son sensibles a la secuencia y a las emociones. Si cada mañana es una experiencia agradable, los niños tendran una motivacion natural para levantarse temprano.
Por eso, segun el Dr. Markham, los padres deben establecer un horario fijo para sus hijos - que incluya el horario de acostarse, levantarse y desayunar - y mantenerlo diariamente, incluso los fines de semana. "El cerebro infantil funciona mejor cuando se da cuenta de lo que esta por suceder", añadio.
Otro factor importante es no usar castigos o amenazas para despertar a los niños. En cambio, usar una voz suave, poner una cancion divertida, abrir las cortinas para que la luz entre en la habitacion... Estas pequeñas cosas tienen la capacidad de despertar el cerebro de forma natural y con menos reacciones negativas.
Segun un estudio de la Universidad de Oxford, involucrar a los niños en la preparacion matinal - como elegir la ropa de la noche anterior o lavarse los dientes - tambien ayuda a los niños a sentirse parte del proceso, en lugar de ser simplemente alguien que ha sido sacado de su sueño.
Finalmente, recuerden que los niños menores de cinco años son un microcosmos emocional: si la noche anterior estuvieron estresados, se quedaron hasta tarde o no se sintieron seguros, la mañana siguiente levantarse temprano sera una batalla. Asi que la leccion mas importante que los padres deben recordar es que la vida es un viaje, no una orden. La paciencia, el amor y la comprension de su ritmo biologico son los despertadores mas eficaces.