Segun la Organizacion Mundial de la Salud (OMS) cada año mueren alrededor de 820.000 personas por complicaciones de la hepatitis B la mayoria debido a la deteccion tardia en la etapa inicial.
Sintomas tenues pero peligrosos. En la etapa inicial la hepatitis B generalmente no tiene signos claros lo que dificulta que los pacientes los ignoren. Segun el Dr. William Schaffner experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de Vanderbilt (EE. UU.): 'Muchas personas infectadas con hepatitis B todavia se sienten sanas durante muchos meses pero el virus ha atacado silenciosamente el higado'.
Algunos sintomas de advertencia temprana incluyen:
Fatiga prolongada falta de apetito especialmente despues de comidas grasas. Dolor persistente en la parte baja de la pantorrilla derecha sensacion de hinchazon en el estomago dificultad para digerir. Amarillo en la piel ligero en los ojos orina oscura color de la heces.
La picazon de la piel especialmente por la noche se debe a la acumulacion de sal del intestino. Estos signos suelen confundirse facilmente con trastornos digestivos o fatiga comunes lo que hace que los pacientes solo los descubran cuando la enfermedad ha progresado gravemente.
Segun el Dr. Andrew Talal experto en higado y riñones de la Universidad de Buffalo (EE. UU.): 'El chequeo periodico es la unica forma de detectar la hepatitis B temprano antes de que el higado se dañe gravemente'. Recomendo que las personas en el grupo de alto riesgo como aquellos que tienen familiares que padecen la enfermedad que han recibido transfusiones de sangre tatuajes o relaciones sexuales inseguras deben hacerse pruebas de HBsAg al menos cada 6-12 meses.
Ademas la vacunacion contra la hepatitis B es la medida de prevencion mas eficaz que ayuda a reducir en mas del 90% el riesgo de contraer la enfermedad. Para las personas infectadas el cumplimiento del tratamiento y el mantenimiento de un estilo de vida saludable el consumo moderado de alcohol y cerveza y comer menos grasa y dormir lo suficiente ayudan a prevenir complicaciones de la cirrosis y el cancer de higado.
La hepatitis B puede permanecer silenciosa durante muchos años pero la deteccion temprana abre oportunidades de tratamiento a largo plazo y control eficaz de la enfermedad. La vigilancia proactiva es la principal 'arma' para proteger el higado y la salud de cada persona.