Segun Reuters, los aranceles del 25% aplicados a los automoviles y sus partes importadas no se superpondran a los impuestos sobre el aluminio y el acero, asi como a los aranceles sobre los productos procedentes de Canada y Mexico.
Los fabricantes de automoviles disfrutaran de un credito para compensar el impuesto del 25% sobre las piezas importadas utilizadas en la ensamblaje de vehiculos en el pais.
Cabe destacar que los fabricantes disfrutaran de una compensacion arancelaria de hasta el 3,75% del precio de venta minorista propuesto en el primer año. Este credito se reducira al 2.5% hasta el 2 de mayo de 2027, despues de lo cual se terminara por completo.
Segun la explicacion de los funcionarios de la Casa Blanca y el Departamento de Comercio, no se trataba de un reembolso en efectivo, sino de una forma de credito fiscal para reducir el impacto de la politica arancelaria.
El secretario de Hacienda, Scott Bessent, dijo que la decision fue el resultado de reuniones entre el presidente Trump y fabricantes de automoviles nacionales y extranjeros, con el objetivo de llevar la produccion automotriz de vuelta a Estados Unidos. Afirmo que la seguridad nacional y los intereses economicos siguen siendo los factores centrales en la politica de ajuste de esta vez.
Anteriormente, la industria automotriz habia expresado su preocupacion por la posibilidad de que los impuestos superpuestos pudieran elevar los precios de los vehiculos, perturbar la cadena de suministro y afectar la demanda de los consumidores.
Sin embargo, incluso con las nuevas exenciones, los fabricantes de automoviles tradicionales en el pais aun enfrentan muchos desafios, como lo demuestra el anuncio de General Motors de que tendra que reevaluar sus objetivos de ingresos en el futuro.