Segun la Organizacion Mundial de la Salud, la dieta de las personas con enfermedad renal debe controlarse estrictamente en la cantidad de grasas saturadas, colesterol, sodio y ingredientes de proteinas altas en el corazon de los cerdos.
Los corazones de cerdo son ricos en grasas saturadas y colesterol. 100 g de corazon de cerdo (intestino delgado) pueden contener hasta 180 mg de colesterol. Las personas con enfermedad renal a menudo van acompañadas de enfermedades cardiovasculares, pero el colesterol alto es un factor que empeora la aterosclerosis, la hipertension, factores que afectan la funcion renal mas rapido.
Ademas, el corazon del cerdo tambien contiene mucha proteina animal. Cuando los riñones se debilitan, la capacidad de filtrar y excretar los desechos del metabolismo de las proteinas se ve afectado, lo que lleva a la acumulacion de urea y creatinina en la sangre. La investigacion muestra que el consumo de mas proteinas animales se asocia con un deterioro de la funcion renal mas rapido en pacientes cronicos.
Ademas, si el corazon del cerdo no se procesa cuidadosamente, es facil transportar bacterias como E.Coli o parasitos como helmintos. Esto puede causar complicaciones de infeccion, especialmente peligrosas para las personas con sistemas inmunes debiles debido a la enfermedad renal.
Aunque el corazon del cerdo es un plato favorito de muchas personas, para las personas con enfermedad renal, tiene muchos riesgos cardiovasculares potenciales, metabolismo e infecciones.
Abstenerse o limitar este plato es necesario para proteger la funcion renal y evitar peor la enfermedad.