Entre los condimentos el ajo es conocido como un alimento beneficioso para la salud especialmente para el higado. Sin embargo para que el ajo maximice sus efectos protectores para el higado es necesario saber como usarlo correctamente.
Segun la investigacion el compuesto allicino el principal ingrediente del ajo tiene una fuerte capacidad antioxidante que ayuda a proteger las celulas hepaticas del impacto de los radicales libres. El ajo tambien contiene selenio y compuestos de niquel que ayudan a mejorar la actividad de las enzimas desintoxicantes en el higado especialmente la enzima glutation peroxidasa.
Sin embargo la alliina no esta disponible en las rodajas de ajo crudo sino que solo se forma cuando el ajo se machaca o se corta en trozos pequeños luego se deja a temperatura ambiente durante unos 10–15 minutos antes de cocinar o comer crudo. Este proceso activa la enzima alliinanasa un catalizador que ayuda a convertir la alliina en alliina. Cocinar el ajo inmediatamente despues de freir destruira esta enzima debido a la alta temperatura lo que reducira la eficacia de la proteccion hepatica.
Segun los expertos comer ajo crudo o ajo que ha sido 'apagado' despues de la destilacion ayuda a reducir los niveles de enzimas hepaticas ALT y AST los indicadores de evaluacion del daño hepatico en personas con higado graso no debido al alcohol.
Tenga en cuenta que comer demasiado ajo crudo puede causar irritacion estomacal presion arterial baja o trastornos de la coagulacion sanguinea. La dosis recomendada segura es de 1 a 2 rodajas de ajo al dia.